Padeció el primer tramo del partido, pero lo encarriló con una gran defensa que dio vuelta la historia por completo y le permitió lucirse adelante. Rotundo 81-61 en su última presentación en casa por la serie regular del Torneo Clausura.
Quilmes, sin Agustín Ecker ni Martín Herrero, revirtió la imagen de un pobre comienzo y, tras las dudas de ese inicio, mejoró ostensiblemente para doblegar a Ciclista Juninense, por 81 a 61, por una nueva jornada de la Liga Argentina de Básquetbol.
Le costó el primer cuarto al “tricolor”. Recién consiguió convertir su primer tiro de cancha a los 5m30s (a esa altura estaba perdiendo 2-11). Ciclista se mostraba concentrado en hacer bien los deberes atrás, y buscando tomar buenos tiros. Ordenado, con una receta simple y efectiva.
Empezó a reaccionar Quilmes con algo de carácter aunque escasa claridad. Los largos brazos de Elian Centeno imponían respeto en la pintura (terminó el primer tiempo con 10 rebotes y 2 tapas), obligando a corregir -y a veces a fallar- tiros.
La visita tuvo a Stanley Scott muy participativo adelante y para los dirigidos por Juan Cruz Izarra casi todo el primer tiempo fue cuesta arriba, corriendo de atrás en el resultado.
La luz de esperanza se encendió cuando aparecieron un par de buenas acciones ofensivas consecutivas del local. Primero, con un muy buen pase interior de Tirrell Brown para el “corte” y el doble de Andrés Lugli. Y a continuación, con una correcta circulación hasta encontrar a Julián Ruiz libre en la esquina izquierda y el consiguiente triple.
Entonces aparecieron los primeros reproches de la noche en las filas del “verdirrojo”. Tras el minuto pedido por el entrenador Daniel Jaule, Quilmes volvió a golpear, con un triple de Brown que le dio por primera vez la delantera al dueño de casa (26-24).
Sin embargo, en el peor momento de Ciclista, Matías Alluchon se hizo cargo de todo. Anotó 8 puntos seguidos y los juninenses podían haberse llevado la victoria parcial. Pero el triple sobre la bocina de Juan Esteban De la Fuente dejó todo empatado.
Si bien el arranque del segundo tiempo resultó desprolijo por ambos lados, Quilmes encauzó el juego por la vía de la defensa. El local incrementó la intensidad, estuvo muy atento para rotar, interceptar línea de pase y en la misma medida en que su juego ofensivo comenzó a fluir, se apagó Ciclista, que además se complicaba con las faltas personales.
Buenos bloqueos para liberar a Juan Esteban De la Fuente y el trabajo de desgaste atrás le dieron la primera ventaja clara al local: 44-37.
También colaboró mucho Julián Ruiz, muy activo en los dos costados de la cancha, reencontrándose con una versión muy útil de sí mismo. Y como Tirrell Brown también sintonizó la misma onda positiva, la brecha se amplió en pocos minutos (55-39).
A esa altura, Centeno (16 puntos y 22 rebotes) era casi el único factor de desequilibrio y Scott se desdibujó por completo. El aspecto defensivo fue clave. Permitió lucirse adelante y, además, dejó anotar apenas 6 puntos a Ciclista en todo el tercer cuarto. Los juninenses lo pagarían caro.
El comienzo del cuarto final encontró a Álvaro Chervo en llamas con su tiro abierto, para asociarse a la fiesta y estirar la ventaja más allá de los 20 puntos de diferencia. Ya no había partido. El vuelco había sido total y le abrió la puerta al festejo “tricolor”.
Quilmes 81
A. Lugli 9, J. Ruiz 10, J. E. De la Fuente 19, T. Verbauwede 7 y T. Brown 16 (FI). A. Chervo 20 y M. Dominé 0. DT: Juan Cruz Izarra.
Ciclista Juninense 61
M. Alluchon 14, S. Scott 9, A. Bruera 9 (x), S. Villa Toro 0 y E. Centeno 16 (FI). L. Di Muccio 5, N. Reynoso 4, A. Sigel 4 y F. Pagura 0. DT: Daniel Jaule.
Estadio: Centenario “Nuevo José Martínez”, de Quilmes.
Árbitros: Pablo Estévez y Rodrigo Reyes.
Parciales: 13-18, 35-35 y 57-41.